En las gélidas noches de diciembre, las calles lucen sus mejores galas, largos vestidos blancos que se cubren bajo un inmenso manto de estrellas.
La iluminada ciudad acoge los primeros cantos de Navidad, observa a los niños bailando, celebrando la llegada de los primeros copos de nieve.
Las casas que ignoramos a diario, cobran vida. Todas ellas desprenden un tierno olor a chocolate que baña las esquinas de cada barrio derritiendo a todo el que pasea.
Llega el mágico momento, donde los abrazos se sienten como si te tocaran el corazón, donde puedes besar a quien tanto esperabas, donde el frío aire hace que se respire mejor.
El contoneo de cascabeles, el delicioso olor a caramelo y el unísono de risas nos hacen esbozar delicadas sonrisas, nos indican que está aquí la Navidad, la época del año donde cualquier rincón se siente como un hogar.
Desde toda nuestra comunidad educativa os deseamos las más sinceras ¡Felices fiestas!
Por Por Noelia Bueno · Alumna Montessori CFGS Educación Infantil
